Baños al aire libre ¿sueño o realidad?

Echando un vistazo a las tendencias actuales podemos sacar una reflexión curiosa, nos encanta crear tendencias que nunca se hayan hecho antes. Y pensareis, muy bien cuéntame algo que no sepa; con esta reflexión quiero llegar al punto en el que nos preguntemos si es necesario hacer todo en contradicción a lo que el hombre lleva toda la vida haciendo.

Está claro que tenemos que aportar creatividad a la época que nos ha tocado vivir, crear nuestra identidad, nuestras ideas propias… Y la verdad que hemos hecho ciertas acciones que sólo han empeorado lo que ya teníamos, pero hay otras que verdaderamente nos han ofrecido una nueva visión de nuestro alrededor.

Así observamos ideas como las de los baños al aire libre. En un primer momento pensaremos en que baños al aire libre no pueden ser nada útiles, y efectivamente así es si pensamos en una gran ciudad, pero en zonas rurales ya no son ningún sueño irrealizable. Este tipo de baños son útiles desde el punto de vista de la ventilación, de la relajación o de contacto con la naturaleza. Ahora pensar en unas vistas paradisiacas, con plantas rodeándonos, un horizonte marino al fondo, la brisa del mar golpeándonos en la cara y un olor salino recorriendo en un escalofrío todo nuestro cuerpo. Está claro que para que estos lleguen a las ciudades quedan muchas cosas que mejorar, pero a principios de agosto a 35 grados ¿a quién no le apetece un baño refrescante?, y encima rodeado de aire y naturaleza.

No me digáis que no utilizarías un baño como los de las ilustraciones. No dudo ni por un momento que así sería.

Otro punto que deberíamos tener muy en cuenta es la zona donde querríamos posicionarlo, hay que tener en cuenta que existen muchos mirones, por lo que tendríamos que cuidar la colocación de este, dentro de nuestra parcela; rodearlo de vegetación que evite miradas ajenas y que a pesar de todo sea práctico para un uso habitual, al menos en verano.

Quizás en un primer momento sea atrevido, más que nada por desconocimiento de cómo reaccionar ante una situación comprometida, pero es probable que al final nadie sería capaz de rechazar semejante placer, como es ducharte acompañado a la luz de la luna. En un principio te sonará raro pero acabaras adorando esas duchas que antes desconocías por miedo a lo que no estás acostumbrado. Pero recuerda que si descubrimos América pensando que caeríamos por un precipicio, no temas porque un baño al aire libre no te matará y seguramente le cojas hasta manía a los baños encerrados entre cuatro paredes.

Deja un comentario

× Whatsapp